miércoles, febrero 17, 2016

Otra Pequeña Muerte

Vibración de pluma 
En cuerda de guitarra 
Desfilará en orillas
Y sobre superficies 
De cielo demasiado estrellado 
Espejada armonía de voces 
Recorriendo el viento 
Barriendo polvo de la ventana 
Agujero que da a la nada 
A veces entra un rayo de luz 
Tímido sobreviviente 
De primaveras de Nagasaki 
Luz derramada en cristales
Tristeza de plata y fruteros 
Que contienen aire oscuro 
Por los días que se acurrucan 
Uno a uno en viejos almanaques
Una mesa de té los saluda 
Detrás de todas las barbaridades 
Que han opacado su brillo
Pentagramas vacíos 
Lánguidos e inocuos
Sin canción ni banda ni alianza 
Aguardarán la simpleza 
De una gota de rocío 
Por la mejilla de tu luna 
Claridad sin formas 
Quererte tan a fondo 
Que los precipicios tiemblan 
Cuando una aguja de esperanza 
Pinchó la verruga de la muerte  
Y la materia ingrávida 
Que la aceitaba de misterio 
Rodó como adoquín en silencio 
Aplastando hortensias y alegrías 
Que deambularon sin rumbo 
En busca de imperfección 
encontraron distancia 
Y cable de arteria 
Por donde viaja sangre imbécil 
Lamiendo las burbujas 
De la menta mas helada 
Los pliegues son pétalos 
Hechos con dolor de huesos 
Buscando la resaca de tus olas 
Que estrellan en el murallón 
De mi agonía 
Recorro camino de ausencia,
Inaccesible es lo peor,
Ser hermético ante la plaga
De tu discurso boca floja 
Aflojaría asedio de arrogancia 
O mitigaría ese aire nefasto 
Qué como mariposa de ceniza 
Se desbarata en playas pequeñas 
Sórdida tristeza de Ciudad 
Negro almidón para lenguas de paliza 
Encastrar los puntales 
Por las grietas del abismo 
Y dejar de ahogar gritos 
En la madrugada de la inercia 
Para acabar la sed de los truenos 
Y decapitar gallinas anticuadas 
Me molestó que intentaras ocultar 
Un escenario tras un silencio 
Una alegría tras una interrogante 
Un antídoto con un veneno 
Mezclando un cock-tail de heces 
Dentro de otro silencio 
No te ausentas, te escondes
Pirámide entre los árboles bajos 
Ruinas de viejos imperios 
En avenidas y multitudes 
Gloria de elefante 
Entre los cactus 
Y mezclar los tantos 
Baraja con trampa
De princesa gitana
Jugar con dados cargados 
Para dormir un poco mejor 
Y volver a engañarse 
Para recortar las alas
No sea cosa que volar sea posible ...


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