Lavados los ecos de un tango
La flor de sus ojos se cerró
Volcaron relojes taladros
Y el viejo fuego se apagó
La luna perdida en febrero
En mayo se oscureció
Y ese ñato del infierno
En tu ángel se convirtió
El lunes ya es cosa de antaño
La muerte se lo llevó
Las huellas de mi poesía
La lluvia las derrotó
Por eso entre la neblina
Y las hadas del corazón
Quedará esta carta vencida
Canción de un tiempo...
Que ya no es.
La flor de sus ojos se cerró
Volcaron relojes taladros
Y el viejo fuego se apagó
La luna perdida en febrero
En mayo se oscureció
Y ese ñato del infierno
En tu ángel se convirtió
El lunes ya es cosa de antaño
La muerte se lo llevó
Las huellas de mi poesía
La lluvia las derrotó
Por eso entre la neblina
Y las hadas del corazón
Quedará esta carta vencida
Canción de un tiempo...
Que ya no es.
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