Júpiter existe. El telón agujereado del cielo canta hoy una primavera hecha con ojos y con perlas. Por una de estas calles de mi barrio tumba la brisa pequeñas florecitas blancas que yo calculo habrían sido manzanas en algún futuro. Sobre la mesa que estuve escribiendo acerca de Alejandro Magno, deambulan incansables multitudes de puzzles, pedazos de cartas, lágrimas arrugadas, partidos de Peñarol o apuntes donde la vida se parece demasiado a la tinta negra de mi birome. Me alcanza con ver a mis amigos, voy a su encuentro montado en un 130 como tantas otras veces y quiero dejar constancia de este sentir ligero y agradable que enmascaro pudorosamente diciendo trigo, diciendo ventana, Júpiter y Alejandro Magno. Hoy no me molesta que caigan decenas dd mensajes a mi WhatsApp, hoy no me molesta dormir fuera de mi casa, hoy no me muerdo las venas repitiendo finitud, lejanía ni ausencia. Hoy festejo humildemente, sonrío demás a propósito, y brindaré a la salud de aquellos amores imposibles, pero sobre todo a la salud de los posibles, de los que hoy mismo, sin ir más lejos me hacen gastar en un boleto y en una caja de vino. Salud!
gracias pr tu bello comentario Un beso
ResponderEliminarA ti por devolver la gentileza
ResponderEliminarCon un buen vino se olvidan las penas.
ResponderEliminarAbrazo
Es cierto, el problema fue que a la mañana siguiente volvieron renovadas por la acción de la resaca jaj
ResponderEliminargracias por pasar!
🙏 😊 🌈 💙 un placer es siempre
ResponderEliminarLeerte
recién leo tu tierno comentario, se ve que estoy desacostumbrado a recibir visitas. muchas gracias y vuelvas prontos!
ResponderEliminar