Se desata una pequeña brisa
En una coordenada de cuartos
Llenos de deseo, de urgencia
Peregrinaje al interior de tus muslos
Ave envaselinada rumbo a la apertura
Negro lobizón amenaza garras
Rayos y tormenta, pasión arrogante
Que encumbra todos tus ángulos
Te invoco en la cama, demente
Absurda, confabuladora, ruleta rusa
Ver lo que se ve en tu ojo izquierdo
No deja de provocarme ácido
Alucinación y corriente directa
De a poco se cae la piel de tu espalda
Curada por cuchilla alta
Yo ahora te toco
Te unto en penumbras
Te arrullo en el vértigo del trance
Desplome, turbulencia,
Voy tejiendo sortilegios
En la sombra de tus piernas
Y sos tan real ...
Me atrapas con el caos de tus ojos
Era de hielo, yo, era
El gato se eriza y defiende su hocico
Por agonías tras bastidores
Luna de Cúneo es grillete
Atados, paralizados, adormecidos
En un éxtasis de ambrosía
Rodamos por colinas
Lejanas de un tiempo hermoso
Fugaz golondrina sin alas
Mariposa que bate sus alas
dos veces
Y vuelve a la eternidad
Apremio físico que expresa
Un interés ancestral
De víscera y cometa
De farolito en la inmensa hoguera
De oscuridad
Desgarrarse y sudar
Golpearse con frenesí
De huracán en el agua
Caderas locomotoras
Entidades neumáticas
Que enhebran hilos por el corazón
Demasiado delgados
Para sostener arañas del alba
Solo rocío acumulado
A un lado de la carretera
Cárcel de espuma abierta
Donde desfilan Ladrones
Rastrillos de dolores y empates
Que degüellan un cordero
Para acallar los rastros
Las huellas de pisada
En las nieves lejanas
Suena el eco de la palabras
Que no hemos dicho todavía
Como polillas en la luz
Ojos vendados y atropello
Uno tras otro los embates
Tocan la cúpula de tu sexo
Y todo es conmoción
Y estática como de tele
Flotando en el aire empapado
Funk de verdad
Seguido de un sueño plomizo
Candado vencido
De alguna anécdota
Sin escolta anda el corazón
Por la rambla de la vida
Chocan mis muslos con los tuyos
Parece el naufragio de un barco
Ruidos de metal y grandes vigas
Retorciéndose, estallando
Entrando en corto circuito
Repentino e ignominioso
Sacrificio en el altar de Dionisio
Costuras reventadas
Por lamidas y cachetadas
Tu cuerpo es como el murallón
Donde rompen mis impertinentes
Olas de angustia y vehemencia
Mi locura de gato con rabia
Remolinos que nos arrastran
Juntos al fondo de otro misterio
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