Falacias que andan oscilando sobre lugares donde crecen sombras, perdón, es que siempre salgo jugando así cuando no encuentro las letras que deseo plasmar en el teclado. Siempre han existido estos raros, siniestros y vergonzosos tsunamis de falacias que golpean sin piedad las cabezas de aquellos que como yo, son tomados por tontos.
Hay que ver qué van a hacer después, cuando este tiempo de ceguera empiece a pasar de largo, como la horrenda nube de pedos que es, hay que ver.
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