lunes, julio 27, 2015

Y nada más

El tibio aliento del viento del norte
avidez desquebrajada de encantos
conmutación del espíritu a la tarde
embriaguez de polizón en hora curva
zona de desembarco para palomas sin nombre
angustia de cenizas tras la savia antigua
aceleración de la locura en cascada interminable
filo de la esperanza, densidad de musgo
sensación de ausencia en gravedad cero
momento despojado de todo sentido
túnel en el tiempo descascarado por radiaciones verbales
flores rotas a la vera de un jardín sin forma
y una postal desde el más absurdo silencio
llegaré a la última curva
 con la voracidad de un esqueleto consciente,
 la sangre de una gaviota mugrienta
el sordo estertor de un hachazo al amanecer
y de vuelta al juego, nada más. 

sábado, julio 18, 2015

Uno de tantos regresos

Y al final volví 
a la cárcel de la ensoñación
al resplandor opaco de mi soledad
vuelta al recóndito sendero 
críptico lenguaje de palabras perdidas
gambeteando una a una las vicisitudes
soy un cometa errante
 anclado a un recuerdo
orbitando quietamente una idea
la forma de un pensamiento
 que no ha tenido lugar

Volví al certamen del fracaso
donde vuelvo a perder
sin reír, murmurando apellidos del pasado
tratando de sostener el mundo
con un dedo

le echo sangre en polvo
a las heridas corregidas
de la suerte destrozada
somos banderas
olvidadas
agitándose en el viento
de otra revolucion

miércoles, julio 08, 2015

Una Galaxia

Enemistad, locura disfrazada al amanecer de la soga
punto sin retorno desde la desintegración imaginaria
abrazo partido en la lentitud de las múltiples penumbras
 que me apremian
vasto pastizal sin fin, argumento vencido en el filo de la cama
paralelo sin forma ni aterrizaje, desmontaje imperfecto
alas desgranándose mienten a su muerte inminente
desfiladero de sangre, donde se ahogan penas sin nacer
el paredón de los ensueños, milagro tridimensional sin materia
herida en el atardecer morado de la infinitud inconstante
labios y media sonrisa, arqueada con apenas simpatía
se desvanece entre recuerdos de cristales rotos 
y levantarse a tomar agua en mitad de la noche
somos espejos, abandonándose para siempre al olvido
al no querer, al llorar acurrucados bajo el mechón de la luna
mordida de la madrugada que envenena las ideas
e ideas al alba que sanarán por siempre, 
cicatrices de amantes embalsamados
por viejos cuentos, plumas de otro amor, 
ejercicios de proyección hasta la muerte
que no hallaron hoja en blanco
 sobre la árida planicie de este tiempo
susurro elemental que persigue
 y caza las sombras de un desvelo
tormentos y pasiones que abordaron como piratas
la decidida belleza de una galaxia
 destruida para siempre