lunes, septiembre 21, 2020

El tiempo según Gerbet

 


Durante los primeros días del 2020, Baltasar estuvo fuertemente enroscado tratando de establecer la arbitrariedad de nuestra cultura, al hacer coincidir el principio del año con el día uno de enero.

- Quién dijo que tiene que ser así? Por qué no el 14 de marzo o el 25 de Febrero? Porque si vamos a los hechos, todos los días se cumple la totalidad de un año, si tenemos en cuenta el mismo día del año anterior. - Decía Gerbet mientras se rascaba la espalda contra el rugoso revoque del muro medianero.

Pasábamos el tiempo hablando sobre masa madre, interfaces gráficas y el diseño más apripiado para las nuevas plazas de deporte. En ésta última materia  nos topábamos con diferencias que a menudo nos hacían enfrentar fervientemente, aún cuando la mayoría de las veces estuviésemos de acuerdo en las líneas generales.  Solíamos argumentar con la mayor carga emotiva sobre los detalles que a cualquiera  podrían parecer insignificantes, pero que ante nuestros ojos resultaban decisivos. Tal fue el caso de la acalorada trifulca que suscitó un debate sobre temperarura de congelación del hidrógeno. Asi como la vez que  sentados a la puerta cerrada de Baker's Bar,  discutimos hasta la ira sobre la correcta preparación de un consomé, la carga impositiva de estados como Korea del Sur o el principado de Mónaco, y la decisión de los ejecutivos de canal 10 sobre la televisión de Polémica en el Barnos mantuvo casi cincuenta días sin dirigirnos la palabra, más allá que seguiríamos compartiendo tiempo de calidad juntos.

Al dia 51, rompiendo el larguísimo silencio, Gerbet sacó del bolsillo interior izquierdo de su chaleco, un bellísimo y delicado reloj de oro, que acto seguido destruyó por completo, arrojándolo contra el polvoriento piso de ajedrez de su sala de estar.

-me cago en el tiempo. -dijo

-sos un tarado - dije

-tarados son lo que son capaces de pagar una fortuna por ese delirante pedazo de maquinaria.

- o sea el resto del mundo.

-sí.

No hay comentarios: